Preparación:
15 min.
Tiempo de cocción:
30 min.
Listo en:
45 min.

¡Si preparar un cheesecake te intimida, esta receta es para vos! Este cheesecake de mango no se cocina, se prepara con gelatina sin sabor y simplemente va a la heladera para tomar cuerpo. La estrella de la receta es el glasé de maracuyá que es súper fácil y aporta un sabor agridulce espectacular.

Ingredientes:

  • 200g de galletitas Lincoln®
  • 45g de manteca, derretida
  • 1 sobre (7g) de gelatina, sin sabor
  • 600g de queso Filadelfia®
  • 200cc de crema de leche
  • 1/2 mango, pelado, sin carozo y procesado

Preparación:

1Enmantecar una tortera de 20cm de diámetro. En una procesadora, triturar las galletitas, agregar la manteca derretida y mezclar. Volcar la preparación en el molde, y presionar con las manos cubriendo toda la base. Llevar a la heladera 30 minutos.

2Para hacer el relleno: hidratar el sobre de gelatina de acuerdo a las instrucciones del paquete. Reservar.

3En una cacerola, calentar a fuego suave el queso crema, el azúcar, la crema de leche, el puré de mango y el jugo de limón. Revolver constantemente sin que la preparación hierva. Una vez que todo esté unido y de consistencia suave, agregar la gelatina, mezclar y verter todo en el molde sobre la base de galletitas. Llevar a la heladera 4 horas hasta que esté firme.

4Para el glaseado de maracuyá: Cortar al medio el maracuyá y retirar la pulpa con una cuchara. Colocar en un bowl. Hidratar el medio sobre de gelatina de acuerdo a las instrucciones del paquete. Incorporar el azúcar y la gelatina al bowl con maracuyá, y mezclar todo. La preparación debe medir 150cc, si hace falta, agregar cucharadas de agua hasta lograr esta medida. Volcar despacito sobre el cheesecake y cubrir toda la superficie. Llevar a la heladera toda la noche.

5Al día siguiente, pasar un cuchillo mojado por los bordes del cheesecake y desmoldar. Servir bien frío.

Porciones:

8