Preparación:
10 min.
Tiempo de cocción:
35 min.
Listo en:
45 min.

Los tomates frescos de verano son los mejores para esta receta, pero también se pueden usar los que vienen en lata. Esta clásica salsa es perfecta para acompañar cualquier tipo pasta, ya sea fresca o rellena.

Ingredientes:

  • 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
  • 1 cebolla grande, picada finamente
  • 1 diente de ajo, picado
  • 1 kg de tomates, sin piel ni semillas, picados
  • 150 ml de vino tinto o caldo de verdura bajo en sodio, o preparado sin sal

Preparación:

1Calentar el aceite en una olla grande. Agregar la cebolla y el ajo, y cocinar ligeramente, revolviendo de vez en cuando, 5 minutos o hasta que estén blandos, pero no dorados.

2Agregar los tomates, el vino o el caldo y la albahaca. Cocinar a fuego moderado de 20 a 30 minutos o hasta que la salsa esté espesa.

3Procesar la salsa en una licuadora o un procesador, hasta que esté homogénea; pasar luego por un colador fino si se quiere un resultado más liso.

4Agregar el azúcar para equilibrar la acidez de los tomates. Incorporar la pimienta para condimentar y recalentar la salsa.

5Usar la salsa según sus necesidades. O verterla sobre pasta recién cocida, revolver bien y terminar con la albahaca y el queso parmesano rallado.

Porciones:

4