15 min.
05 min.
20 min.
Me encanta servir esta sopa con un toque extra de crema batida y semillas de sésamo. Si te gusta una sopa con consistencia más cremosa, se puede procesar en la licuadora.
Ingredientes:
- 300g de hojas de espinaca, sin tallos
- 50g de queso de cabra, fresco
- 100cc de crema de leche
- 1 pizca de sal
- 1 pizca de pimienta
- 1 cucharadita de semillas de sésamo
- 1 cucharada de aceite de oliva
Preparación:
1Enjuagar las hojas de espinaca. Colocarlas en una cacerola con agua hirviendo con sal y cocinar 1 minuto. Colar y colocar rápidamente en un bowl con agua helada. El shock de frío evita que se sigan cocinando y conserva el color verde intenso.
2En una cacerola, mezclar la espinaca con unas cucharadas del agua de cocción. Agregar el queso de cabra y la mitad de la crema de leche. Condimentar con sal y pimienta.
3Colocar las semillas de sésamo en una asadera y tostar en el horno por apenas unos segundos.
4Servir la sopa en 2 bowls, colocar una cucharada de crema en el centro y rociar con aceite de oliva. Espolvorear con semillas de sésamo y servir.
Porciones:
2