20 min.
40 min.
60 min.
Una receta muy simple y llena de sabor por la incorporación de nueces y frutos secos. Una torta ideal para una tarde fría de invierno.
Ingredientes:
- 6 huevos
- 1 cucharadita de sal
- 600g de azúcar
- 6 cucharadas de cacao
- 350g de harina leudante
- 250g de margarina
- 2 cucharadas de bicarbonato de sodio
Preparación:
1Precalentar el horno a 180 ºC (horno moderado). Enmantecar y enharinar un molde de torta rectangular.
2Derretir la margarina en una cacerola, suavemente para que no hierva.
3Mezclar la margarina derretida, el azúcar, la sal, el cacao, la harina y el polvo de hornear en un bowl.
4En un recipiente aparte batir los huevos enteros con una batidora eléctrica logrando un batido espumoso y firme.
5Añadir los huevos al resto de la mezcla y revolver suavemente, para incorporar sin quitar la textura aireada.
6Añadir todas las semillas y las nueces y mezclar de nuevo.
7Colocar la masa en el molde. No se va a volcar fácilmente, pero se nivelará mientras se cocina en el horno.
8Es una buena idea poner un poco de semillas de girasol en la superficie de la torta, ya que le aporta un sabor agradable, pero queda a su elección.
9Llevar al horno durante 40 minutos. El tiempo puede variar, si al chequear la torta después de 40 minutos, aun está muy húmeda, hornear por 10 minutos más.
10La torta tiene una consistencia húmeda y pegajosa cuando se corta, pero es deliciosa.
Porciones:
12