Preparación:
30 min.
Tiempo de cocción:
15 min.
Listo en:
85 min.

La focaccia es uno de los panes más simple para hacer, y un buen punto de partida si te gusta la panadería casera. Esta receta es muy simple y fácil, y te permitirá variar de sabores agregando albahaca, romero, orégano, sal gruesa o lo que quieras.

Ingredientes:

  • 1/2 cucharadita de miel
  • 1 (7g) sobre de levadura seca activa
  • 160cc de agua caliente (45 ºC)
  • 250g de harina
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 4 cucharadas de aceite de oliva, dividido

Preparación:

1En un bowl grande, disolver la miel y la levadura en el agua tibia. Dejar reposar hasta que esté cremosa, aproximadamente 10 minutos.

2Agregar 25g de harina, sal y 3 cucharadas de aceite de oliva a la mezcla de la levadura. Revolver hasta que se mezclen y luego incorporar el resto de la harina. Amasar la masa hasta que esté suave y elástica, unos 7 minutos. Añadir sólo suficiente harina para evitar que la masa sea pegajosa. Aceitar ligeramente un recipiente grande, colocar la masa en el recipiente y dar vuelta el bollo para cubrir con aceite ambos lados. Cubrir con un repasador húmedo y dejar levar en un lugar cálido hasta que doble su volumen, aproximadamente 1 hora.

3Desgasificar la masa y volcarla en una superficie ligeramente enharinada. Estirar la masa en un rectángulo de 1cm de espesor. Colocar en una placa para horno de 20x30cm, aceitada. Cubrir y dejar levar hasta que duplique su volumen, aproximadamente 40 minutos. Mientras tanto, precalentar el horno a 200 ºC (horno fuerte).

4Con el dedo, hace hoyos en la superficie de la focaccia presionando suavemente, y rociar una cucharada de aceite de oliva por encima. Cocinar en el horno precalentado durante 15 minutos.

Porciones:

4