20 min.
40 min.
60 min.
Ésta es una receta que convierte lo ordinario en extraordinario. Este plato de pollo, cocido en una salsa de tomate y condimentado con ajo asado, tiene un gran contenido de vitaminas B₆, C y niacina, poca grasa y un sabor fabuloso.
Ingredientes:
- 2 cabezas de ajo, peladas
- 2 pechugas de pollo, unos 150 g cada una, sin piel
- ½ cucharadita de pimienta
- 2 zanahorias, rebanadas finas
- 1 echalotte grande, picado fino
- 4 tomates enteros en lata, sin semillas y picados
Preparación:
1Precalentar el horno a 180 °C (moderado). Cortar la parte superior de cada cabeza de ajo y envolverlas en papel aluminio. Hornear una hora o hasta que estén blandas.
2Mientras tanto, cubrir con aceite en aerosol una olla o un recipiente refractario mediano, y poner a fuego medio. Condimentar el pollo con pimienta, agregar a la olla y cocinar 4 o 5 minutos de cada lado, o hasta que esté dorado. Pasar el pollo a una fuente.
3Agregar las zanahorias y el echalotte al refractario y freír unos 2 minutos o hasta que esté blando. Volver a poner el pollo, con el lado sin piel hacia abajo, en el refractario. Agregar los tomates, el caldo, el vino y el romero. Llevar a hervor; tapar y pasar al horno. Hornear el pollo de 30 a 45 minutos o hasta que el jugo salga claro.
4Sacar los dientes de ajo de su piel con la punta de un cuchillo afilado y aplastar hasta homogeneizar. Incorporar el ajo a la salsa de tomate. Servir sobre fettuccine, cocido en el momento de acuerdo con las instrucciones del paquete, y decorar con el perejil.
Porciones:
2