15 min.
65 min.
80 min.
Una torta que combina una de las combinaciones más clásicas: chocolate y café, en una masa suave y húmeda. Queda muy bien como postre, acompañada de salsa de frambuesa, o para la hora del té, y sencillamente espolvoreada con azúcar impalpable.
Ingredientes:
- 350 g de chocolate con leche, picado
- 115 g de chocolate amargo, picado
- 450 g de manteca, cortada en cubos
- 250 cc. de café expreso
- 220 g de azúcar negra
- 8 huevos
- 850 g de frambuesas congeladas, descongeladas
Preparación:
1Precalentar el horno a 180 º C (moderado). Cubrir el fondo de un molde redondo de 23 cm con papel manteca.
2Poner manteca, café y azúcar a hervir en una cacerola mediana, revolviendo para disolver el azúcar.
3Colocar el chocolate en un recipiente grande y agregar la mezcla hirviendo de café caliente. Batir hasta que quede suave. Dejar enfriar un poco. Incorporar los huevos de a uno a la vez, batiendo con cada adición. Verter la mezcla en el molde preparado.
4Colocar el molde dentro de una fuente de horno. Llenar la fuente para horno con agua caliente hasta llegara la mitad del borde de la tortera. Hornear hasta que el centro de la torta esté firme y un palillo insertado salga limpio o con pocas migas húmedas de torta pegadas, alrededor de 1 hora. Retirar del agua. Enfriar durante la noche.
5Hacer un puré con las frambuesas en la procesadora. Enfriar. Servir con la torta helada.
Porciones:
12
